A finales de abril se confirmó que el acuerdo al
que habían llegado el Groupe Bernard Tapie (GBT), Full Tilt Póker (FTP) y
el Departamento de Justicia norteamericano (DOJ) para que los inversores
franceses tomaran posesión de los activos de la sala había quedado
oficialmente roto.
En el anuncio que el Groupe Bernard Tapie hizo llegar a
los medios, los Tapie se mostraban remisos a renunciar a su deseo de
lanzar una sala de póker online.
“A no ser que se encuentre una solución concreta
y legal en los próximos días para pagar a los jugadores y salvar a los
empleados de FTP, pasaremos a nuestro nuevo plan de acción”.
Para Laurent Tapie, “los próximos días” es una
expresión que significa mucho menos tiempo que para el resto de los mortales,
ya que el propio martes 24 en que se conocía la ruptura del acuerdo, por la
mañana, le enviaba a los empleados que ocupan los puestos de mayor
responsabilidad en Full Tilt Poker el siguiente correo electrónico, destapado
por Diamond Flush Poker.
“Considerando el trabajo que hemos estado realizando
juntos para relanzar FTP durante los últimos siete meses, creo que es mi deber
informaros de la actual situación y mis planes, antes de dar a conocer un
anuncio de prensa en las próximas horas.
El acuerdo con el DOJ está roto, y las negociaciones
han terminado...
Según el último informe de XXXX (un empleado
relacionado con la sección de finanzas de la empresa), Pocket Kings tiene
suficientes fondos para pagar los salarios de abril, pero no los de mayo.
En consecuencia, como alternativa a la compra, le
ofrecí a Ray Bitar licenciar los activos de manera temporal, con el fin de
relanzar la sala, preservar el valor de los activos y participar en una
eventual subasta como postor en el futuro.
Ray necesitaba la aprobación del DOJ para esto. Mi punto
de vista acerca de la situación era diferente: pensé que como las compañías
estaban claramente en una situación de insolvencia, como su representante legal
Ray tendría que haber aceptado inmediatamente esta oferta, que era la única
oferta concreta que había para preservar los empleos, el efectivo y el valor de
los activos de las compañías. Además, el DOJ no es el dueño de los activos
hasta que decida -si es que alguna vez lo hace- embargarlos.
Pero Ray se mantuvo en su posición de que la aprobación
del DOJ era imprescindible.
Así que hicimos una oferta al DOJ y pese a nuestros
esfuerzos, y sin que me sorprendiera, el DOJ no lo permitió...
Me reuní con Ray el pasado viernes y le sugerí que
declarara insolventes las compañías en cada uno de los países en los que se
encuentran y que informara a la plantilla de que no podía asegurarles el puesto
de trabajo por más tiempo. Considerando que siempre ha considerado necesaria la
aprobación del DOJ en los siete meses que llevo observándole no sé si lo haría.
Según las respuestas del autor de la noticia en los
comentarios de la fuente original, no sabe de ningún empleado de Pocket
Kings que haya aceptado la oferta, y con seguridad no lo han hecho
"TODOS", como pedía Tapie.